S A M O A



LA PERLA DEL PACÍFICO SUR


"El primer amor, el primer amanecer y la primera isla del Sur, siempre son recuerdos aparte” decía Robert Louis Stevenson, famoso autor de La Isla del tesoro. Para él, sin embargo, Samoa fue su última isla, recaló en Upolu al final de un largo viaje por la vida y decidió quedarse allí para siempre.
Aún hoy, el archipiélago de Samoa sigue siendo el centro espiritual y cultural de la Polinesia, si bien no constituye su centro geográfico. En este “jardín del Edén” viven en armonía cerca de 180.000 habitantes de semblanza gentil, fuerte, cordiales e inteligentes, que constituyen el núcleo más intacto de pura sangre polinesia.
Samoa está dividida en Samoa Occidental y Samoa Americana, pero los samoanos se preocupan poco de esta división política, considerándose un único gran pueblo.
Estas islas son realmente un paraíso, donde se vive rodeado de una generosa naturaleza que cede magnánimamente todos sus encantos. Playas de blanco puro, verdes montañas, rocas negrísimas que brillan en un mar limpio, una jungla prepotente y majestuosa, frutos tropicales y flores perfumadas.
Además, un clima óptimo, nivelado entre los 24 y 31 grados. Estación calurosa y húmeda de diciembre a marzo, suave y seca de abril a noviembre. Samoa está a 12 horas respecto a España y 13 en nuestro verano.
Oficialmente este estado independiente de Samoa es un país insular, uno de los cuatro que integran Polinesia y uno de los catorce que conforman Oceanía. Su capital y ciudad más poblada es Apia, en la isla de Upolu.
Anteriormente conocida como Samoa Alemana de 1910 a 1914 y Samoa Occidental desde 1914 hasta 1997, es un país que comprende la parte occidental del archipiélago de Samoa, en el Pacífico Sur. Se independizó en 1962 y las dos principales islas del país son Upolu y Savai’i.
El grupo completo de islas, incluyendo a la Samoa Americana, eran llamadas antiguamente “Islas Navegador” por los exploradores europeos del siglo XIX, dada la destreza para navegar de los samoanos. Debido a su huso horario, actualmente es el primer país en recibir el año nuevo junto con Kiribati.

UNA LEYENDA SAMOANA
Es incierto el origen exacto de su nombre, sin embargo, según una versión de Sa-IA-Moa, que se traduce del idioma samoano como “consagrado a Moa”, el nombre está relacionado con una leyenda polinesia, en la cual el dios del universo Tangaloa tenía un hijo llamado Moa y una hija llamada Lou. Cuando Lou se casó tuvo un hijo llamado Lu (también llamado Lou). Una noche mientras dormían, Tangaloa escuchó a su nieto cantar las palabras “Moa-Lu, Moa Lu”. Después de un tiempo cambió su procedimiento y empezó a cantar “Lu-Moa, Lu Moa”, o lo que es igual poniendo su nombre antes que el de su tío Moa. El dios Tangaloa lo escuchó y se enfadó mucho, creyendo que su nieto era muy arrogante. Le pidió a Lu que le rascara la espalda y cuando empezó a hacerlo, Tangaloa tomó al niño y empezó a golpearlo. Horrorizado, Lu escapó y se fue a vivir a la Tierra. Tangaloa también le advirtió que debía honrar a su tío Moa. Una vez ya en la Tierra, Lu recordó el mandato de su abuelo y decidió nombrar a su nuevo hogar “Sa-IA-Moa”. Con el tiempo este nombre se transformó en Samoa.
Sin embargo, entre los nativos existen otras diferentes versiones de la leyenda popular.

HISTORIA
La historia de Samoa comenzó cuando inmigrantes de las islas Lau, en el este de Fidji, llegaron a las islas los primeros samoanos, aproximadamente hace casi 3.000 años y de ahí se establecieron en el resto de Polinesia. El contacto con los europeos comenzó en los primeros años del siglo XVIII, pero no se intensificó hasta la llegada de los comerciantes y misioneros británicos alrededor de 1830.
A través del siglo XIX, el Reino Unido, Alemania y Estados Unidos reclamaron partes del reino de Samoa y establecieron puestos de comercio. En 1919, bajo el Tratado de Versalles, Alemania abandonó sus reivindicaciones por las islas.
Nueva Zelanda administró Samoa Occidental con un mandato de la Sociedad de Naciones y luego con un fideicomiso de la ONU hasta que el país obtuviera su independencia el 1 de enero de 1962 bajo el nombre de Samoa Occidental.

RELIGIÓN
Casi toda la población es cristiana. Las iglesias con más seguidores en Samoa son: la iglesia cristiana congregacional de Samoa (35,5% de la población), la iglesia católica (19,6%), la iglesia Metodista (15%), la iglesia de los Santos de los Últimos Días (12,7%), Asamblea de Dios Samoana (10,6%) y la iglesia Adventista del Séptimo Día (3,5%).
Samoa es un país mayormente cristiano, pero su porcentaje decae cada año, pasando de un 80,2% a un 70%.
Hay aproximadamente de 800 a 900 personas islámicas en el país, que conforman menos del 0,02% de la población. Existen alrededor de 1200 personas que son budistas y unos 1250 hindúes. Además, hay un gran porcentaje de personas que no practican ninguna religión.
La mitología samoana es importante y básicamente una variante dentro de la Mitología de la Polinesia. Tangaloa es el dios creador y también es mensajero de éste. Atu es el primer hombre en habitar Fidji y Tonga junto con Sasae. Estén otras deidades dedicadas a otras facetas cotidianas, como Pargani, dios de las estaciones.

DIVISIÓN TERRITORIAL
Samoa se divide en once distritos distribuidos en las islas principales de Upolu y Savai’i.
En la isla de Upolu (incluye islas menores): Tuamasaga, Aiga-i-le-Tai, A’ana, Atua y Va’a-o-Fonoti.
En la isla de Sava’i los distritos son: Fa’asaleleaga, Gaga’emauga, Gaga’ifomauga, Vaisigano, Satupa’itea y Palauli.

GEOGRAFIA
Samoa se encuentra aproximadamente a mitad de camino entre Hawai y Nueva Zelanda, en la Polinesia.
Las islas son de origen volcánico o coralino. El clima es tropical cálido y húmedo. La población aborigen es polinésica, muy mezclada con asiáticos y europeos. Las islas ofrecen, en cuanto a instalación humana, dificultades para pequeños grupos como para poder subsistir solos. El aislamiento deriva de la distancia entre las islas, que se ve atenuado debido a la mejora de las comunicaciones. El grado de evolución social y económica depende de la antigüedad y la intensidad de la influencia extranjera, y de la riqueza de la potencia soberana. En la Polinesia cada archipiélago es diferente y tiene carácter propio, resultado de las influencias físicas, humanas y del condicionamiento histórico y geográfico.

ECONOMÍA
En Samoa la economía siempre ha sido dependiente de las exportaciones agrícolas y de las divisas enviadas por sus nacionales, así como de la ayuda exterior. Dos tercios de la población se dedican a la agricultura, siendo la actividad más importante la exportación de copra y de aceite de coco y otros derivados de la planta.
El sector industrial está dedicado casi en su integridad a la transformación de productos agrícolas. El sector más en auge es el del turismo, que en la actualidad ofrece empleo a un 25% de la población.
Siguiendo las indicaciones del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial ha mejorado su estructura financiera, permitiendo la entrada de socios bancarios extranjeros y controlando su inflación.
Son también importantes recursos económicos el cacao, té, arroz, bananas, caña de azúcar, café y algodón.

DEMOGRAFÍA Y CULTURA
De acuerdo con el censo de hace unos pocos años, la población es de alrededor de 200.000 habitantes, de los cuales 40.000 corresponden a población urbana y el resto a población rural. En Apia, capital y centro comercial de Samoa, viven alrededor de 40.000 habitantes.
La mayoría de la población es agrícola y muchos habitan en tribus. El 50% de la población de Samoa habita o trabaja en el exterior. La mayor parte lo hace en Nueva Zelanda, Australia o en la Samoa Americana, como primera etapa antes de emigrar a Estados Unidos.
Los nativos de Samoa son un 92% de la población. Las principales comunidades en el extranjero están en Nueva Zelanda, Australia y Estados Unidos.
Los idiomas oficiales son el samoano (que guarda bastante relación con el maorí, hawaiano y el taitiano) y el inglés, que está bastante extendido.
Para desplazarse existen varios vuelos y transbordadores diarios entre Upolu y Sava’i. Para moverse dentro de las islas hay autobuses entre distintas poblaciones.
Por lo que respecta al alojamiento, Samoa Occidental no es un país que reciba gran cantidad de turismo, por lo que no hay muchos hoteles. Los hay, sin embargo, de todas las categorías. Resulta bastante frecuente, sobre todo en Sava’i que el visitante reciba invitaciones para permanecer en alguna casa particular. Caso de aceptar, hay que tener siempre presente que no se dispone de las mismas facilidades que en Europa y que hay que corresponder al agasajo con un regalo. Es la costumbre.
En el apartado de la gastronomía, el plato tradicional es el palusami, una crema de coco envuelta en hojas de taro (un tubérculo que sustituye a la patata), acompañado de fruto del pan cocinado sobre piedras calientes y luego servido con taro cocido y pescado.
Una de las experiencias culinarias más llamativas consiste en asistir a una típica fiesta umu, en la que se ofrecen platos cocinados en un horno típico polinesio. Asimismo, cabe considerarlo como una experiencia gastronómica interesante en Samoa el asistir a una degustación de kava en un fale (una cabaña tradicional samoana). El kava es la bebida más popular de las islas y se trata de un derivado de la raíz de la pimienta, junto con otros ingredientes secretos.
La influencia australiana en el capítulo de la alimentación ha conseguido que en los últimos años hayan proliferado, especialmente en Apia, restaurantes de comida rápida especializados en hamburguesas, batidos, pizzas, etc. Por su parte, la comida china también está presente en las islas.
Por lo que se refiere al apartado del shopping, el mercado de Apia concentra la mayor actividad comercial de las islas y resulta de visita poco menos que inevitable. En sus tiendas pueden encontrarse tallas de madera, tazones decorados, tambores, cestas, alfombrillas trenzadas o conchas gigantes muy propias de estas latitudes.
Aventurarse en estas islas de la Polinesia, recorrer su geografía y disfrutar de sus playas de ensueño, puede, sin lugar a ningún género de dudas, convertirse en un viaje inolvidable.

(Ver interesante colección gráfica de este reportaje en GALERIA DE FOTOS)